martes, 2 de diciembre de 2014

Los 21 ultras detenidos en la “batalla campal” del Calderón pasan hoy a disposición judicial

Barcelona. 02/12/2014. Pilar Bayón, Juli Climent y Meritxell Salas. Los 21 seguidores radicales que fueron detenidos después de la reyerta acaecida en los aledaños del Vicente Calderón pasaran este martes a disposición judicial, según la información que han proporcionado fuentes oficiales del Cuerpo Nacional de Policía a Europa Press. Además, 6 de los protagonistas de la grave trifulca  presentaban ya antecedentes por robos violentos, daños materiales y lesiones, desórdenes públicos y amenazas.


Los violentos ultras arrestados, entre los que se encuentran 12 miembros del grupo “peñístico” Riazor Blues (Deportivo de la Coruña), 6 del Frente Atlético (Atlético de Madrid), 2 de los Bukaneros (Rayo Vallecano) y 1 de los Alkor Hooligans (Alcorcón), todos con ideologías radicales, declararán a lo largo del día de hoy ante el Juez de Instrucción del Juzgado de Guardia de Detenidos. Con las confesiones ante el Juzgado, se procurará poder determinar quién fueron los responsables directos del asesinato de Francisco Javier Romero Taboada, un hincha del conjunto coruñés, de 43 años de edad.

El ultra de los Riazor Blues, fallecido el pasado domingo en la reyerta del Vicente Calderón.
Fuente: Cope
La Comisión Nacional del Deporte había catalogado –posteriormente se ha demostrado su grave equivocación- el partido como “de bajo riesgo”. Sin embargo, se ha desvelado que a lo largo de los días anteriores al duelo futbolístico, los dos grupos de ultras del club colchonero y la entidad gallega se enzarzaron, picaron y citaron por conversaciones supuestamente privadas para enfrentarse previamente a la disputa de la jornada liguera. Según declaraciones de la delegada del Gobierno de Madrid, Cristina Cifuentes, “la cita se realizó por vías cerradas y no por redes sociales en abierto”.

Asimismo, cabe destacar también que la afición coruñesa contó con la presencia de radicales de otros equipos de la Liga española, dejando entrever que el problema de violencia deportiva está arraigado en nuestra competición nacional. Ante este deplorable panorama extradeportivo, ni la Comisión ni la Policía percibieron los piques de los grupos ultras españoles previos al choque de la Liga BBVA.

“Jimmy”, tal y como se denominaba al aficionado del equipo gallego, murió tras los graves altercados que tuvieron lugar antes del partido de la Liga BBVA y en los que fue duramente golpeado con una barra de hierro y arrojado a orillas del río Manzanares. Según informa la autopsia del cadáver, el fallecimiento de Jimmy se produjo por culpa de un “traumatismo craneoencefálico con hemorragia interna y estallido de víscera maciza y bazo”. El cuerpo del ultra deportivista será transportado durante la tarde de hoy a La Coruña para ser velado en el tanatorio Albia. Posteriormente será depositado en el cementerio de Feáns.  El entierro tendrá lugar este próximo miércoles 3 de diciembre.

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